Contra la bronca política

La candidatura del PSA, queridos bloggeros, dedicará su tiempo al diálogo y la participación social frente a la bronca y la crispación generada por los demás candidatos para cumplir los objetivos de sus respectivos partidos políticos.

En la carrera que mantienen los partidos presentes en el ayuntamiento por seguir crispando a la sociedad, dejan a un lado los problemas que afectan a la ciudadanía sevillana. La práctica del PSA no incurrirá en esa especie de “delito” que suelen practicar las organizaciones políticas sin tener en cuenta que el dinero público debe destinarse a crear o mejorar los servicios públicos. Así, cuando llegan al poder se dedican a derribar con la única y absurda finalidad de aparentar que son mejores sin tener en cuenta que administran mal el dinero de la ciudad.

Mientras tanto, los barrios caminan a trancas y barrancas, sin guarderías suficientes ni centros de atención a mayores y personas dependientes que permitan la incorporación de las mujeres al mercado laboral, sin instalaciones culturales y deportivas adecuadas a la demanda social, y sin la seguridad ciudadana merecida por una ciudad de la grandeza universal de Sevilla.

Por eso el PSA, queridos oyentes, dice Sí a la acción frente a esas discusiones estériles que sólo sirven para ralentizar el progreso de Sevilla en materias como la Educación, la Salud, el Medio Ambiente y la conservación de su excepcional Patrimonio Histórico-Artístico.

Sí a la ejecución, para que nada se quede en proyectos o promesas incumplidas.

Sí a la reivindicación, para que los gobiernos de la Junta de Andalucía, España y la Unión Europea cumplan con Sevilla de acuerdo con su grandeza histórica y su realidad actual y finalmente desde el PSA decimos

Sí a la representación, para que en los foros políticos y económicos de todo el mundo sean conocidas las posibilidades de inversión de Sevilla, con la consiguiente generación de empleo, y su capacidad para combinar una identidad única y singular con el ejercicio laboral y profesional.

Antonio Rescalvo