Renovar o morir

Ya nadie duda hoy día que la temperatura superficial media de la Tierra ha aumentado durante los últimos años y que las actividades humanas aumentan los niveles de los gases de efecto invernadero que tienden a calentar la Tierra.

Si ir más lejos, en Sevilla estamos observando estos días cómo nos encontramos con temperaturas impropias de estos meses. Por eso, necesitamos un ayuntamiento que lidere una Sevilla más ecológica y que contribuya con su política a mejorar la salud de los sevillanos.

Proponemos un plan integral para la instalación de placas solares en los edificios de titularidad municipal con la finalidad de lograr el doble objetivo del ahorro energético, abaratando su costo de mantenimiento, y de protección del medioambiente.

Hay que subrayar la importancia de que sean los propios Ayuntamientos los que encabecen la lucha por una ciudad y por un mundo más habitable. No podemos exigirle a los ciudadanos que separen la basura para reciclar, hagan un uso razonable del agua y de la electricidad y después despilfarremos en los edificios públicos. Es incomprensible que cada sevillano se mentalice de la importancia de su compromiso individual, cuando el Gobierno Municipal no pone los medios que tiene en su mano para ahorrar energía y usar otras menos contaminantes.

La protección del medioambiente ha sido y sigue siendo una prioridad para nosotros (ahí está nuestra lucha en la Plataforma contra la Central Térmica de Sevilla), por eso vamos a pelear en todos los frentes posibles por conservar todo el patrimonio de nuestra ciudad, incluido su medioambiente. Cuando estemos en el Ayuntamiento, nos pondremos la tarea de sacar adelante un plan que permita reducir la deuda municipal, que todos sabemos que está en el límite de la legalidad, ahorrando energía y, al mismo tiempo, contribuyendo a proteger uno de nuestros bienes más preciados. La segunda parte del plan tendría como protagonistas a los propios ciudadanos. Si predicamos con el ejemplo, queridos oyentes, y dotamos a los edificios oficiales de placas solares, podremos incentivar, en un segundo paso, a los ciudadanos de a pie para que hagan lo propio en sus casas, promocionando la arquitectura bioclimática en las nuevas ampliaciones de la trama urbana, así como en la rehabilitación de los edificios antiguos cuando sea técnicamente viable.

Antonio Rescalvo